Confesiones de un sicario

/// Guillermo Jaramillo Torres

A través de una red de contactos que incluía ex funcionarios, ex policías, narcomedunistas, etcétera, el escritor y periodista Juan Carlos Reyna conoció a Drago, un sicario y lugarteniente de uno de tantos cárteles mexicanos de la droga. Del fruto de esta relación nace el nuevo material bibliográfico Confesiones de un sicario que presenta la editorial Grijalvo.

El libro está basado en una serie de entrevistas realizadas al sicario quien, al momento Reyna de contactar con él, tenía poco de haber salido del programa de Testigos Colaboradores de la Procuraduría General de la República.

Este material surgió a partir de una investigación para el documental Confesiones de un sicario, dirigido por Matías Gueilburt y coproducido por Pablo Galdfré y el mismo Reyna. Dicho documental fue transmitido por el canal Infinito en noviembre del año pasado.

Escrito en primera persona en voz de Drago, el libro no está confeccionado a la manera del periodismo ortodoxo, señaló Reyna.

Reyna indicó que existía un interés primario en denunciar al sistema generalizado de corrupción en que se vive en México, y consideró que este interés se ve plasmado en el material.

“No  me interesa denunciar a funcionarios en particular ni a capos, sino revelar cómo opera un sicario, la psique interna de un asesino y con esto denunciar el sistema generalizado de corrupción que sólo se puede ver señalando la vida cotidiana de una persona como esta”.

Tiene que ver con décadas de priismo, de panismo y perredismo corrupto, de corporaciones de policías degeneradas y gobernantes alienados, así como lo que se vive a diario en las familias como la violencia familias, la falta de participación ciudadana, el ausentismo de la vida política en el país.

Si no matas, te matan

Drago es un hombre deshecho donde habitan el bien y el mal. Se acuesta con ángeles y demonios y en él se libra la batalla del sicariato, donde se vive otro tiempo, el cual pasa de manera diferente, pues, señala Reyna, no hay tiempo para detenerse a realizar juicios morales.

“Si tú no matas, a ti te matan. La muerte adquiere un peso simbólico, no es cosa nueva pues desde tiempos prehispánicos se le ha dado a la muerte un peso que es muy fuerte que tiene que verla como una especie de manifestación”, apuntó Reyna.

Pero ya no basta con matar sino con demostrar mediante una especie simbólica basada en códigos de lealtad.

Al entrar de lleno a la investigación, Reyna se encontró con aspectos desconocidos para él como fue la idea general de “cártel”, donde desmitificó la organización jerárquica y hegemónica para pasar a cédulas o alianzas que de ningún modo forman un grupo.

Acerca de Guillermo Jaramillo

Siempre he sido un hombre abordado por el tranvía de la duda. Disfruten de lo que puedo dar.

Un Comentario

  1. denisse

    me gusto mucho por que la verdad asi es ese mundo del narcotrafico bien dicen las canciones

    si no sirves para matar, sirves para q te maten

Deja un comentario