El mismo mensaje y sus nuevos emisores

/// Héctor Camero Treviño

El inicio de la primera guerra ganada con un teclado y un ratón

El inicio de la primera guerra ganada con un teclado y un ratón

Entre el discurso que hace apología de las nuevas tecnologías de la comunicación es lugar común defender la noción de que las herramientas no son armas de uso exclusivo para una empresa o Estado. Que cualquiera puede hacer su blog y difundir lo que le venga en gana, y por ende,  que su uso tiende hacia la tan anhelada utopía democrática.

Lo cierto es que Barack Obama rompió la regla del universo recién creado de las aparentes “no reglas” y descaradamente invitó a todos los líderes relacionados con la web 2.0 y las altas tecnologías de la información a trabajar en pro de un sólo objetivo: la supremacía estadounidense del siglo XXI.

El pasado jueves 17, Obama tuvo una cena con toda la tropa de Silicon Valley, en San Francisco, California. Y no con empresarios cualquiera, prospectos a contar con un changarro en la era de la información. Los apellidos Zuckerberg y Jobs encabezaron la comitiva de oyentes del electropoderoso Obama.

El objetivo de esta reunión, al menos en el papel, se expresa en los siguientes términos, según la nota del 18 de este mes en El País.

“Durante la cena, el presidente les pidió ideas para consolidar la posición de dominio comercial en la escena internacional, con «el objetivo de duplicar las exportaciones en los próximos cinco años y apoyar millones de puestos de trabajo en EE UU», según explicó el recién estrenado jefe de prensa de la Casa Blanca en el encuentro. También discutió sus «propuestas de inversión en investigación y desarrollo y para aumentar los incentivos a las empresas para crecer y contratar», y «la importancia de nuevas inversiones en educación».

Como cuando te juntas con tus principales aliados y el motivo de tal reunión es cuestionado por un tercero ajeno, le tapas el ojo al macho hablando de las cosas políticamente correctas, esperables de un encuentro tan sui generis.

Verborrea al más puro estilo: buenas intenciones que, viéndolas bien, están desenfocadas respecto a las funciones de los empresarios en cuestión. “Duplicar exportaciones” y “apoyar millones de puestos” suena más a maquinaria pesada y materias primas, no tanto a Google (Eric Schmidt, consejero), Yahoo! (Carol Bartz, presidenta) Cisco Systems (John Chambers, delegado), Oracle (Larry Ellison), Twitter (Dick Costolo), NetFlix (Reed Hastings), Universidad de Stanford (John Hennessy), Genentech (Art Levinson), The Westly Group (Steve Westley) y Kleiner Perkins Caufield & Byers (John Doerr) .

Por ende, la suspicacia acerca del verdadero fin de esta reunión está latente.

LA TRADICIÓN Y LA INNOVACIÓN EN CHOQUE ENCARNEYZADO

En el marco de la Sospecha Insidiosa, tenemos que cinco días después de esta poco ortodoxa reunión, a miles de kilómetros de distancia, el pueblo de Libia exige la salida del sempiterno Muammar Al-Gadaffi.

Pero desde hace dos semanas, todos elogiábamos el poder de las redes sociales para organizar a toda la prole en contra de los “dictadores insoportables” para los pueblos árabes. Impensable que en los 60’s o 70’s se pudiera contar con una herramienta tan económica para vincular las necesidades de la sociedad en torno a un objetivo común, blablabla.

Siguiendo con el conteo de días, también nos encontramos con una grata sorpresa poco difundida en los medios.

Aunque Don Internet ha llegado; las pancartas en inglés, el signo hippie y las banderas gringas no pasan de moda

Aunque Don Internet ha llegado; las pancartas en inglés, el signo hippie y las banderas gringas no pasan de moda

Desde el 27 de enero, Barack Obama cuenta con otro jefe de prensa. Jay Carney es su nombre, y contrario a lo que se espera de un vocero gubernamental, su designación no es nada fortuita.

El conocimiento de Carney de las relaciones internacionales y la comunicación debería estar bien marcado con sólo estos tres datos:

-Tiene un título en estudios de Rusia y Europa del Este.

-Le ha tocado estar en el colapso de la Unión Soviética, cubriendo el otro colapso, de Bill Clinton en 1996 cuando el Huffington Post (primer periódico 100% electrónico) reveló el asunto Lewinsky; así como viajando en el Air Force One en el que viajó George W. Bush el 11 de septiembre del 2001.

-Fue uno de los pioneros en la prensa gringa en manejar el blog como herramienta.

Decíamos a propósito de los WikiLeaks que el fin de la comunicación política como la conocemos se estaba acercando. Entre que sí y no, la política comunicacional, que es otra cosa, está siendo modificada por Obama para formar a todos sus muchachos en un solo objetivo anteriormente señalado.

LISTA DE ASISTENCIA

Jefe de comunicaciones conocedor de relaciones internacionales y nuevas tecnologías: Presente.

Dueños o CEO’s de las empresas de mayor influencia en el ámbito de las interfases comunicativas, las redes sociales, los micromensajes, el duopolio de la búsqueda por Internet, todos ellos compartiendo el pan y la sal en tu mesa de porcelana: Presente.

Presidente árabe anteriormente omnipotente al que se le imputa una masacre y al que se dedica cuando menos un gráfico animado referente a su brutal y extenso dominio, por parte cada periódico en línea en toda la galaxia: Presente.

Armas tradicionales, químicas, nucleares, metafísicas, aledañas al arsenal comunicacional previamente mencionado: Presente.

Señoras y señores, el salvador de Medio Oriente ha llegado. Quisiera no pensar que la teoría de la conspiración está correcta, quisiera no pensar que la OTAN quiere apoderarse de Libia, ni recordar que EU busca nuevos líderes a modo en el mundo árabe; quisiera recordar que cualquier parecido con la historia, con un llamado bíblico a luchar por la justicia y la libertad no es más que una jalada…

Pero veo que a la Última Cena Obamista acudieron ¡12 apóstoles informativos! y no pude evitarlo.

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